Senador Marco Rubio: Los mismos que glorifican al asesino en masa Fidel Castro, ahora hablan mal de El Salvador
El senado asevera que es absurdo criticar a Nayib Bukele por devolverle la seguridad a los salvadoreños.
EL SALVADOR.- El senador estadounidense, Marco Rubio, aseguró que la política exterior elegida por el presidente Joe Biden «es apaciguar a los adversarios de Estados Unidos y condenar al ostracismo a sus amigos».
Ejemplo de ellos, es en América Latina y el Caribe, «donde la administración levanta las sanciones contra el régimen comunista de Cuba y la narcodictadura de Venezuela mientras las impone a socios como El Salvador», enfatizó Rubio.
«Para un presidente que dice amar la democracia, es una elección curiosa», cuestionó.
El Gobierno del presidente Nayib Bukele redujo la tasa de homicidios gracias a la captura de más de 67 mil pandilleros en el marco del Régimen de Excepción, logrando que las familias salvadoreñas que vivieron asediadas por las pandillas ahora vivan en tranquilidad.
Sin embargo, el senador de Estados Unidos señaló que «todo esto no ha impresionado a la administración de Biden. Lejos de respaldar a Bukele, la Casa Blanca ha sancionado a miembros clave de su gobierno. Eso no debería sorprender, dado que los activistas del Partido Demócrata, las mismas personas que glorifican al asesino en masa Fidel Castro, ahora hablan mal de El Salvador como una dictadura emergente y un bastión del ‘antiliberalismo’. La medida revela cómo la ideología, no la democracia, está impulsando a los izquierdistas estadounidenses y al presidente en deuda con ellos».
«A pesar de lo que escuchas de la administración Biden y los expertos de izquierda, Bukele es un líder elegido democráticamente que ha promulgado reformas con la colaboración de los legisladores y las personas que lo eligieron», enfatizó Rubio.
Finalmente, el senador de Estados Unidos aseveró que «yo sería el primero en condenar cualquier movimiento tiránico de Bukele, pero también creo que es absurdo criticarlo por devolverle la libertad a los salvadoreños».